martes, 24 de abril de 2007

UNA EXPERIENCIA IRREPETIBLE!!!



Bueno chicos, como casi todos sabeis, la aventura de montar a caballo me ha supuesto un trauma enorme, el cual ha derivado en unas secuelas fisicas y psiquicas irreparables, la verdad que a estas alturas mas bien solo psiquicas, porque gracias a Dios, las fisicas ya se me han pasado.


Supongo que no soy la única integrante de la taska con esta opinión, verdad KIKE?? pero no te preocupes que he encontrado los caballos perfectos para nosotros, no tienen efectos secundarios, no hay que susurrarles al oido y con estos si que nos vamos quedar con toda la peña de valonsadero.


,

1 comentario:

kike dijo...

Se llamaba Yerba, pero ella se habría escrito a sí misma Llerva, porque era yegua tonta. Tengo la impresión de que se había fumado a sí misma o a su potro, un caballito que a ojos de otros resultaba querido y risueño y que en realidad era el mismísimo diablo.
Superman sobrevivió al caballo pero yo no. Me han diagnosticado muerte total e irreparable. Os estoy escribiendo desde el mismísimo infierno, en donde tengo al lado a Boris Yeltsin y a la madre del caballo que en lenguaje de signos ecuestre me está ayudando a escribir estas lindezas sobre Yerba, o Llerva, o, como la bautizaron los eunucos: la joderutas de Carlos.

Es cierto Cris: a esos caballos de fondo amarillo hay que darles más oportunidades...